Blind.

Una descarga de sonidos planean por el ambiente, la calle es un ser vivo, y la vida brota de cada esquina.
Siento las conversaciones recorrer distancias, la comunicación es una herramienta de la mañana.
El frutero vocea su buena nueva, unas mujeres se detienen y comentan algo relacionado con el color de las manzanas, un niño llora su impotencia, mientras la madre tira de él, dirección al colegio.
El humo del tabaco avisa de su llegada, seguido del sonido de sus tacones, cuando pasa a mi lado, el perfume penetra por mis fosas nasales e invade territorios..
Es la vecina del quinto, se llama Rebeca, y va camino al hospital a visitar a su madre enferma.
Entro a la panadería, y pido una barra de bandeja, dejo los 50 céntimos encima de la encimera y tanteo con la mano la superficie, hasta agarrar la barra y percibir su crujiente corteza crepitar bajo mis dedos.
Salgo de la panadería y cuento los pasos que me quedan hasta llegar al portal.
Tanteo con la mano la cerradura y abro , son ocho pasos antes de toparme con el primer escalón.
Subo despacio y cojo el ascensor, mis dedos presionan el tercer botón y comienzo el ascenso.
Salgo frente a la puerta de mi casa, y abro sin mayor dificultad.
El olor a ti se apodera del entorno y lo persigo.
Es mi mejor guia, una mano invisible y poderosa que me lleva hasta ti.
Y allí estas tu, tumbada en la cama, las palabras salen de tu boca y yo las siento cruzar el espacio que nos separa hasta estrellarse entre mis labios...yo también te quiero.
Me tumbo a tu lado y te beso el cuello desnudo, y te acaricio la espalda, y susurro el deseo en tu oído....nos queda toda la mañana por delante...
Y quiero besarte,empaparme con tu sabor los labios, quiero acariciarte cada rincón de la piel, quiero naufragar en tu olor y oír mi nombre en tus labios.....lo único que no puedo hacer es verte, pero te puedo gozar de tantas maneras que me sobra un sentido.