domingo, 12 de diciembre de 2010

Ausencia.

Duele.
Como todos los puñales.


Enlace perdido.
Horizonte cautivo.
De mil bocas atadas.


Humilde.
Llega y abarca.
Parcela a parcela.

Los rincones del alba.

Usurpando del alma las voces.
Que perdidas caen por el hueco.
De la escalera desahuciada.


Cuando el mundo es la punta.
Del alfiler opaco.
Y no hay mas contagio.
Que ella.


Mata princesas.
Con su lengua nefasta.
Borra los nombres de las pizarras.


Apropiándose a herida.
De la única salida.
Sin rastro de sangre.


Amante exclusiva.
De amores insanos.
Está su boca llena.


Rémora de vientres.
Colecciona los nombres.
Que no tiene.

2 comentarios:

  1. duele, duele mucho la ausencia, deja las manos huérfanas de caricias, los ojos sin miradas.

    Precioso poema, un beso

    ResponderEliminar