viernes, 30 de abril de 2010

Fear.

Las bestias se remueven.
Las oscuridades penetran.
Los campos.
Los mares.
Abarcando todos los lugares.
El sol vuela libre.
Proyectando sombras.
Guerreros que invoca.
En un intento de liberar.
Tu pecho.
Del dolor derecho.
Que curva tu carne.
Tu camino.
Que sangra tu destino.
Las sombras de sol.
Señalan tu miedo.
Tejiendo primero.
Redes que cubran.
Lo que a tu cuerpo turba.
Sácalo fuera.
Que sienta el dolor.
Del calor.
Que sienta el hambre.
De no tocarte.
Libéralo.
Vístelo con otros nombres.
Dibújalo con otras caras.
Desmitifica su frente.
Y golpea su vientre.
Dómalo.
Como se doma a la fieras.
No aceptes sus condenas.
Que te acepte como un igual.
Nunca te dejes dominar.


Por el.

jueves, 29 de abril de 2010

You.

Porque te sentí desde pequeño.
Cuando la luna callaba.
Cuando el sol mostraba.
Cuando tus manos nacían.
Cuando mis párpados sentían.
Tus dedos.
Mis sueños.
Ayer.
Ahora.
Y quizás mañana.
Cuando rebuscando entre mis ganas.
Aparezcas de nuevo.
Bella y de frente.


Siempre presente.

Amanecer de tu boca.

A veces se abre la puerta.
Cuando la luna está en lo alto.
Y las estrellas fugaces se arrojan al mar.
Presas del fuego.
Exilio de cielo.

A veces la luz invade.
Los sueños, en esta hora.
En que se pinta la cara la aurora.
Y se solapan las esferas.
Liberándose las olas.
El mar se da la vuelta.
Las estrellas cuelgan.

Sueños del revés.
Tu aliento en mi ser.
Tu boca en mi boca.
Mi alma volando.
Sin timón.
Navegando.
Por este naufragio.
Que es el amanecer.
De tus brazos.
Con el mapa de tu cuerpo.
Tatuado en mi piel.

martes, 27 de abril de 2010

I miss you.

Te echo de menos.
Verbo.
Acción.

Te echo de menos.
Adjetivo.
Color.

Te echo de menos.
Ombligo.
Porque contigo.
Puedo equilibrar.
La rueda que gira.
El ojo del huracán.

Te echo de menos.
Esfera.
Porque de alguna manera.
El secreto esta en ti.
El secreto que nunca aprendí.

Te echo de menos cielo.
Porque cuando me falta tu consuelo.
Me quedo sin anhelos de sentir.
El desborde de mi.

Te echo de menos viaje.
Porque cambié tu pasaje.
Por cientos de recuerdos.
Que embalaron mis ganas.
De continuar la carrera.
A donde quiera que fueran.
Mis mapas.

Te echo de menos bandera.
Porque no tengo fronteras.
Que jugarme al destino.
De los mares contenidos.
En el horizonte de mi mirada.
Esclava de nada.

Te echo de menos dinero.
Porque derroché primero.
Mis ganas de amor.
Y por este error.
Que es mi mayor acierto.
A ti te dedico.
Tan sólo un tanto por ciento.
Que me gustaría fuera gigante.
Y con el , poder darle.
A cada boca que llora.
Alimento de sobra.
Para tejer un futuro.


Te echo de menos coraje.
Porque a veces, abandoné mi cuerpo al anclaje.
De no dar el primer paso.
De quedar encerrado.
En el universo de mi.
Sin mas salir.
Que la proyección de mis sueños.
Desde pequeño.

Te echo de menos a ti.
A la mujer que alguna vez conocí.
Que amé.
Que soñé.
Que sentí.
Porque vives todavía.
Igual que sangra la herida.
Igual que te busco y vuelves.
Distinta y presente.
De tu frente otro nombre.
Pero la misma pasión...


Siempre.

De cómo convertirse en superhombre.

"En mi horizonte se han elevado pensamientos como nunca había visto antes; quiero guardar silencio sobre ellos, y mantenerme en una tranquilidad inquebrantable.
La intensidad de mi sentimiento me hace estremecer y reír.
El día anterior había llorado en exceso durante mis paseos, aunque no lágrimas sentimentales, sino de júbilo, cantaba y decía tonterías, poseído por una nueva visión de las cosas, con la que cuento antes que cualquier otro hombre."

Friedrich Nietzsche.

Primero.
Olvida la partida.
Los primeros conocimientos.
De vida.
Las lecciones del maestro.
A las que siempre estuviste atento.
Bórralas.
Desactívalas de tu mente.
Siéntelas volar de tu frente.

Después vendrán las experiencias.
Tu sangre.
Tu carne.
Tus piernas.
Tu camino recorrido.
Todos tus adjetivos.
Los labios que besaste.
Los cuerpos que dejaste.
Atrás.

La muerte en vida.
Del que amó sin medida.
Sufriendo la caída.
De la despedida.

Nombres, lugares, rincones.
Te sobrarán las razones.
Para visitar los cementerios.
De tus latidos que fueron.
Revívelos por última vez.
Y vuelve a caer.

Sólo visitando tus fondos.
Encontrarás el modo.
De renacer.

Silencio.

Sentirás el corazón vacío.
El horizonte sin lineas.
¿ Cómo seguir la partida?

Olvídate.
Escápate de ti.
Instalándote fuera.
De todas y de ninguna manera.

Respira profundo.
Sintiendo por un segundo.
Todo el silencio acumulado.
A cada lado de tu costado.

Que la calma se instale.
En tu pecho.
En tu vientre.
Que todo lo invada.
Que los diques revienten.

No estas.
Eres.

Tu energía crece.

La claridad se cuela por los vértices.
Del templo de tu mente.

No estás.
Eres.

Tu yo emerge.
De las profundidades.
Levantando nuevas ciudades.
Mientras tu alma retoma.
Su reino, que honra.
Cada latir de tu corazón.
Renovado.

Primavera.

En la mañana se revuelve tu figura.
La mas bella criatura.
De tu cintura, la vida.
De tus ojos la luz.
De tus labios la fruta.
De tu pelo refugio.
De tus senos calor.
De tu frente el destino.
De tus hombros el mundo.
Se desparrama el deseo.
De sentirte primero.
Por ti pelean los vientos.
Confabula el tiempo.
Callan los sabios.
Enloquecen los cuerdos.
Por ti abro mis manos.
Libero mi pecho.
Sin importarme.
El fuego, la sangre, ni el miedo.

lunes, 26 de abril de 2010

Desire.

Pegaso irrumpe en el cielo.
La pasión se desborda a cada momento.
Cabalgando por las venas de la noche.
Almacenando sueños.
En frascos pequeños.
Que arroja al suelo.
Estallando en mil pedazos.
De su regazo.

De los sueños rotos.
Se liberaran vapores.
Que se elevaran al cielo.
Con nuevos honores.
Convertidos en estrellas.
Hijas predilectas.
De la blanca luna.
Que las mima.
Que las cuida.
Que las nombra.

Mientras tú, Pegaso.
Nunca miras hacia atrás.
Mientras buscas tu bandera.
Tu último destino.
Tu horizonte preferido.
Tu carne.
Tu sangre.
Tu manantial de deseo.

Y mientras tu figura recorre la noche.
Las hogueras prenden.
Las cinturas hierven.
En una danza de cuerpos.
Fiel reflejo de tus alas de fuego.

A la mañana.

Hay un murmullo de horas.
Que se acumulan en el registro de un nuevo día.
Una página en blanco.
Un corazón latiendo.
Un hombre que ríe.
Dos metáforas que sueñan.
Y tres intenciones de besarte.
De refugiarme en tus lugares.
En tu pecho.
En tu orilla.
Contando cada costilla.
Las horas no importan.
Mientras te vas probando los nombres.
Primero Rocío , después Mañana.
Mientras te toca mi verso.
Mientras te saluda mi alma.

Tower of dreams.

Rápido entendiste.
Las reglas del juego.
De los mares.
Del cielo.
Construyendo una torre de sueños.
Desde tus labios.
Desde tus dedos.
Noche a noche.
Verso a verso.

Un aviso.

Las bestias del destino.
Derribaran tus ladrillos.
Pero se mantendrá intacta.
La estructura.
Que es tu alma.

domingo, 25 de abril de 2010

Yin Yang.




En el centro del círculo.
Una lucha.
De siglos.
En los limites se suceden las ciudades.
Los soles.
Los vientos.
Tan cerca.
Tan lejos.
Del firmamento.
Crimen y castigo.
En un mismo testigo.
Tú.
De tu sangre.
De tu carne.
De tus dones.
Vomitaras tus errores.
Buscando soluciones.
No insultes al asesino.
Que hay en ti.
Como queriendo liberar.
La carga que has de soportar.
No seas juez.
Tan sólo parte.
De la moneda de ahora.
De la de antes.
Equilibra tus pasos.
Aceptando a ratos.
Tus sombras.
Tus luces.
Tus llantos.
Sólo desde tu ser completo.
Comprenderás el secreto.
De vivir en la tierra.
De ganar una porción de cielo.
De tus adentros.

My Friend.

Estoy contigo.
No mires para atrás.
Que las oscuridades no van a tocarte.
Confía.
En la alegría.
Que te mando desde mi corazón.
Solo tu tacto.
Solo tu olor.
Bastan para parar.
La rueda que llega.
Y que no respeta.
Yo la condeno.
Y desde mi voluntad la freno.
Besando tus ojos.
Sintiendo tu miedo.
Sólo así puedo establecer la conexión.
Que nos separa.
Cuando a ti te devora.
La criatura que llora.
Desastres.
Que enferma tu alma.
Y te deja sin nada.
Yo soy tu.
Y así de esta manera.
Saltaremos la frontera.
Que te separa de la vida.
Que mancilla tu alegría.

Déjame que llore por ti.
Déjame sentir el dolor de las garras.
Que laceren mi espíritu.
Como lo hacen contigo.

Mi amigo.

sábado, 24 de abril de 2010

La dramática historia del niño que lloraba pompas de jabón.


Un alma deshabitada.
Otra mañana abierta.
Nueve años es una bonita edad.
Sin mas preocupaciones que jugar.
Esto es lo que piensa el adulto.
Que olvidó el tributo.
Que tuvo que pagar.
Para despedirse de Wendy y de Peter Pan.
Por eso desdramatiza.
Y trata con risa.
La odisea de un niño y su manera de ser.
Tan especial.
Dos palmaditas en la espalda.
Un beso en la mejilla.
Diciendo adiós desde la orilla.
De su seguridad.
De hombre adulto.
Despide a su hijo.
En las puertas del colegio.

El niño camina.
Intentando sacudirse los complejos.
De sentirse un polizón.
En la entrada del primer circulo.
Del infierno.
Tan eterno.
Cada mañana.
Cada estación.

Paga el tributo a Caronte.
Entregando el justificante.
De su ausencia.
De su cuerpo vacío.
Libre de motivos.
Para aprender.
La lección de los libros.
De él.

Ocupa su asiento.
Y en el mismo momento.
En que abre su cuaderno.
Repleto de dibujos.
Adornado de cuentos.
Siente el aliento.
De la burla.
Del hastío.
Del insulto repetido.
De su compañero de atrás.
Que oculta bajo un disfraz.
Todas las carencias afectivas.
De un padre que no existe.
Y de una madre que no está.

Y llora pompas de jabón.
De distintos tamaños.
De distintos colores.
Mientras le apuntan con el dedo.
Condenando por entero.
A su alma.
A la prisión.
De la incomprensión.
Del miedo.
De la ausencia de colores.
Donde reflejarse sin dolores.

Se abre la herida.
De un camino largo.
Sumido en el letargo.
De una lucha eterna.
Sin asumir la condena.
De la vida.


No se dará por vencido.
El fuego está en el.
Por eso aprieta los dientes.
Dando la espalda a los presentes.
Y se exilia a otro planeta.
Ajustando su chaqueta.
Sus cabellos rubios.
Mientras piensa:

"Soy el Principito"

Piano.

El piano suena.
Afirmando cada naturaleza.
Armonizando el tiempo.
A cada momento.
Sus notas flotan en el aire.
La dirección no importa.
Los mares nunca dictaron.
La dirección de las olas.
Salvaje el sonido.
Que se desprende de cada latido.
La vida y la muerte.
En el mismo patente.
Del sentir.


La música.

viernes, 23 de abril de 2010

Thank you, Love.

Te doy las gracias.
Con el labio abierto.
Con la mirada fijada.
Con la espalda libre.
Con mis manos enamoradas.
Con la vida fluyendo.
En este momento.
En que tres vidas nos separan.
Y las estancias del tiempo.
Borraron ya nuestros aposentos.

Te doy las gracias desde la certeza.
De conocer la grandeza.
De cada grano de arena.
Que libero mi condena.
De espíritu gris.


Te doy las gracias.
Por cada poema.
De fuego.
De tus caderas.

Te doy las gracias por venir.
Desde ti.
Y compartir tus espacios.
Tus soles.
Tus colores.
Tus palabras.
Tu piel y tu cielo.

Te doy las gracias por quererte.
Asomándome al pozo.
De tu pecho.
Y ver mi reflejo.
Mis ojos.
Mis labios.
Mi todo.
Que te quedases con eso.
Y que me amases por completo.
Desde todos tus puertos.

Te doy las gracias.
Porque si alguna vez no sentí.
La soledad.
Fue desde ti.
Desde tu frente y tu memoria.
Por mucho que nos distanciaran las horas.
Desde tu pecho de fuego.
Desde tu ombligo de sueños.
Desde tus labios de sangre.
Desde tus ojos sin dueño.

Por eso te digo te quiero.
Amor.
Y recuerdo tus rostros.
Tus labios.
Tus cantos.
Tus cuerpos.
Tus nombres.
Tus vientos.
Y todas tus certezas.
De bailes de belleza.
En mi estomago receptivo.
A encontrarme contigo.

Dream of Icaro.

Volaba alto.
Sin importarle las condenas.
De los dioses profanos.
Que le negaban las manos.

Volaba libre.
De las rutinas.
De cada esquina.
De los que le querían poseer.
Sin saber que no se puede.
Dominar a quien no quiere.
Permanecer.

Volaba sin miedo.
Directo al cielo.
Porque cuando estas liberado.
De norte y herida.
Solo importa la partida.
La superación.
El siguiente escalón.
Atrás quedaron el Demiurgo.
Y algún Dragón.
También el Minotauro.
Que anda despacio.
Desde que comprendió.
Que el laberinto.
Son sus cinco sentidos.

Volaba sólo.
Porque para comprender el todo.
Tienes que soltar amarras.
Del centro de tu alma.
Directo al sol.
Sin miedo.
Sin duda.
Libre de armaduras.
Bien vale una muerte.
Si de esta suerte.
Se renace cien veces.
Con el alma abierta.
Para volver a volar.
Y perseguir tu sueño.
Aunque sea pequeño.

Loco.

En el centro del pecho.
Algo se agitaba.
Distinto al resto del mundo.
Algo profundo.
Un mar liberado.
Un cielo en las manos.
Su corazón no bombeaba sangre.
Apenas sentía hambre.
Cada rincón de su alma.
Era un crepúsculo en llamas.
Le sobraban las ganas.
De soñar.
De beberse los mares.
De escrutar todos los lugares.
Niño.
Hombre.
Alma gigante.
Cercada por los límites de la razón.
De su alrededor.
La armonía se escapaba del mundo.
Dinamitando heridas profundas.
En su contacto con la gente.
Que le trataba de demente.
Por ser diferente.
A cada ruptura del alma.
Lloraba la nada.
El vacío de no poder sentir.
De unos labios.
El latir de otro corazón.
En su misma dirección.


Le llamaban Loco.

jueves, 22 de abril de 2010

La ola que quiso llegar a la luna.

Un cúmulo de algas y conchas.
Son náufragos de orilla.
Llegaron hasta este lugar.
Con una historia por contar.
Lo hacen de mañana.
Cuando el sol apunta.
Al espacio abierto.
Cuando el mar susurra.
Memorias del viento.
Lo que la noche dejo en el ambiente.
En el alma de la gente.
Que contempló la historia.
De la ola.
Que quiso llegar a la luna.
También se acercan los cangrejos.
Dos estrellas de mar.
Y un reflejo de luna sin disfraz.
Un susurro de estrellas en una caracola.
Es el preámbulo.
Del espectáculo.
Que comienza a relatarse sin mas.

Imaginense a la luna.
Dama blanca.
De siglos inmensa.
Plena de belleza.
Gobernando cielo y mar.
De las profundidades de su reflejo.
Se crea un núcleo.
Un perfil del espejo.

Los peces deambulan alrededor.
Atraídos por el fulgor.
De la naturaleza lunar.
Mezclada con una porción de mar.
Asistiendo al nacimiento.
De una ola.
Que en sus primeros minutos de vida.
Se siente atraída.
Por el mar de arriba.
Por sus puntos brillantes.
Por el amor gigante.
Que le profesa.
Con una sonrisa abierta.
Su madre, la luna.

Siente la calidez de sus rayos.
En forma de abrazos.
Que acunan su alma.
Recién nacida.
Aliento de vida.

Late su corazón.
Como un tambor.
Los peces lo saben.
Las algas lo entienden.
Cada criatura es consciente.
Del espíritu del mar.
Contenido en una ola.
Nacida en esta hora.
En que a las princesas les da por soñar.

La ola sueña.
Con llegar a la luna.
Y bañar su hermosura.
De madre.
De luna.
De amor confinado.
Al exilio de los tejados.

Retumba su corazón.
Acumulando su fuerza.
Sus sueños rebasan.
Sus ilusiones descansan.
Arriba.
Una dirección.
Una intención.
De llegar a lo mas alto.
Del horizonte.

Fue un instante.
De derroche.
En que una ola.
Voló.
Alto.
Voló.
Fuerte.
Pero no fue suficiente.
Derramando en su caída.
Un racimo de sueños.
Que quedaron esparcidos.
Por los rincones mas escondidos.
Del mar.

La luna lloró.
Provocando una lluvia de estrellas.
Un silencio de soles.
En suspenso todos los amores.
Que miraron al cielo.
Buscando consuelo.

Aquella noche.
Una ola.
Se convirtió en leyenda.
Reflejo eterno.
De una lágrima de luna.
De un amor que perdura.
Por siempre jamás.

miércoles, 21 de abril de 2010

De cómo curar las heridas.

Primero.
Cierra los ojos.
Abre las puertas.
Siente tu cuerpo.
Respira primero.
Siente el latir.
De tu corazón.
Partir.
A cada región.
De tu alma.
¿Lo notas?
Notas un tope.
Un dique.
Ahí está la herida.
Que trastoca tu vida.
Una acumulación de recuerdos.
Un nudo.
Profundo.
Mientras la vida es lo que sucede.
En las afueras.
De tus fronteras.

Recuerdate.
Vive.
Canta.
Y levanta.
No mueras en vida.
Sin sentir la alegría.
De cada día.
Así que respira.
Escucha cada latido.
Que tu mundo se reduzca.
A la música.
Sientela fluir.
Correr paralela.
A tu sangre gemela.
Descubrirás primaveras.
Brotar de tus venas.

Es tu vida.
Energía que recorre.
Tu vientre.
Poco a poco.
Abre los ojos.
Al principio cegará la luz.
Pero liberaste una cruz.
Un recuerdo.
Primero.
Quedan muchos.
Queda herida.
Pero esto sólo es el principio.
De la partida.
Para vivir la vida.
Para agarrar los sueños.
Que vuelan sin dueño.
Para conquistar tu corazón.
Despidiendo al dolor.

martes, 20 de abril de 2010

Conexiones.

En alguna parte del mundo.
Alguien canta.
Un corazón por garganta.
El viento cómplice.
Lleva la voz.
Que es un talón.
De sentimiento.
Profundo.
Como la corteza del árbol.
Como la memoria del daño.
Como el sabor de unos labios.
Quizás sean los tuyos.
O los mios.
Y esta voz sea un rumor.
Que se escapada de los dedos.
De quien quiere primero.
De quien te vio.
Un instante fugaz.
Y te quiso sin mas.
Porque no hay razones.
Para los corazones.
Porque somos fuego.
Quemando rutinas.
También alivio.
Mano tendida.
Para quien anda perdido.
En el borde del precipicio.
Quizás hoy te pesaba la cruz.
Y sin un porque.
Llego la luz.
De alguien que te vio.
Detrás de tus ojos.
Recorriendo los pozos.
De tu alma.
Encontrando tu llave.
Sintiendo tu karma.
Liberando complejos.
Dibujando los puntos.
De tu cuello al ombligo.
Guiones profundos.
De una pasión.
Por venir.
Desde algún lugar.
Hacia ti.

lunes, 19 de abril de 2010

Lover of moon.

Camina despacio.
Sin importarle los lazos.
Que el tiempo lanza.
A sus talones.
Firmes son sus convicciones.
De observador del cielo.
De soñador eterno.

Azul es la estampa.
De sus ojos.
Que miran al cielo.
Que es su consuelo.
Su exilio.
Su imperio.
Sin mas evangelios.
Que la conquista.
De una estrella.
Cada noche.

Haciendo derroche.
Enfocó a la luna.
Buscando fortuna.
En su brillo de dama.

Los sueños de cuna.
Se arremolinaron en su cintura.
Y el brillo marfil.
Señalo su desliz.
Su descaro.
De mirar los senos dorados.
De la luna.

Ella contesto con un reflejo.
Un rayo complejo.
Que cegó los ojos.
Que abrió los tiempos.
Del amor distante.
Entre la luna.
Y su amante.

Madre Tierra.

Retina.
Un ojo que ajusta.
Un paisaje que esconde.
Lo que la naturaleza responde.
A cada paso que das.
Sin pararte a sentir.
El corazón de ti.
Los colores danzando.
Ante tus ojos mirando.
No ves.
No te das cuenta.
De la esencia.
Demasiado ocupado.
En tus costados.
Tu ombligo no es el mundo.
Hay algo mas profundo.
Que late.
Esperando un rescate.
De tus manos.
De mis manos.
Que la agonía.
Se torne en alegría.
Que los arboles.
Sean estandartes.
De vida.
Sin importar la partida.
De cada rutina.
Del mundo.
Y sus rumores.
Que son los temores.
De la tierra.
Que es madre.
De sangre.
Y presa constante.
De las lanzas.
De nuestros oídos sordos.
A las enseñanzas.

Love for earth

http://www.youtube.com/watch?v=RE20uuhnOd4

So far....So near.

La distancia es una lágrima.
Una era.
Tres vidas.
Una esfera.
La distancia es una porción.
De aire.
Entre tu cuello.
Y mi labio.
Entre tu horizonte.
Y mi camino.
Un deseo de tocarte.
Una palabra que darte.
Una ilusión.
Prendida por la llama.
De mi alma.
La distancia es un reloj.
Marcando las horas.
Que faltan para la aurora.
La distancia es una cortina.
Que corrige el deseo.
De mirarte.
Desde cualquier parte.
Y desde aquí te digo.
Que no hay distancia.
Por mas que se empeñe el destino.
Entre tu labio.
Y el mio.

domingo, 18 de abril de 2010

Hope of light.

Sus ojos de arena.
Albergan tormentas.
De noches eternas.
Cayendo al vacío.
Su alma, una porción de ombligo.
Nunca desatada.
Siempre encerrada.
Su espalda, una colección de estrellas.
De puertas adentro.
Sin vivir el consuelo.
De andar desnudo.
De sentir el aire.
De sentir el brillo.
Condenado a coraza.
Acorralado de llanto.
Carne de desencanto.
Condenado a la rutina.
De servir la doctrina.
Del miedo.
Que llegó primero.
Y se instalo en su vientre.
La oscuridad gira.
Y aniquila.
Las posibilidades de aire.
De cambiar el semblante.

La música es la dama.
Que alivia su drama.
Aplicando calor.
Al congelador de latidos.
De sueños perdidos.

Gira la rueda.
Se abre la tierra.
Primer contacto.
Un abrazo.

Tiemblan las rodillas.
Quema la herida.
Sobran las palabras.
Que se pierden.
Entre fugaces destellos.
De los ojos mas bellos.
Del mundo.

Dama Blanca.

En la colina del final del mundo.
El tiempo sale despedido.
En sus intentos por dar abrigo.
A la mujer del vestido.
Dama blanca.
Dicen los sabios que es un intento de luna.
Que cada noche acentúa.
Los espacios vacíos del mundo.
Los rincones profundos.
Un disparo de luz.
Una melodía.
Sus manos delicadas.
Acarician las cuerdas.
Venas eternas.
Del arpa del olvido.
Acuden en masa.
Hasta su casa.
Augurios.
De presente, pasado y futuro.
Espíritus errantes.
Sin vida ni ahora, ni antes.
Nada pueden hacer.
Para detener.
La melodía eterna.
Que sostenida en las cuerdas.
Es principio y fin.
De las hogueras de este mundo.

Brotha.

A mi hermano.
Feliz Cumpleaños.


Ríos de sangre corren por mis venas.
Lo que fui.
Lo que soy.
Sangro al aire.
Sangro sin importarle.
Al tiempo y sus argumentos.
A los relojes.
Que avanzan.
Bordando los rincones de mi vida.
De mi alma.
A veces son palabras de arena.
Que se los lleva la calma.
Otras, son palabras de fuego.
Amores.
Consuelos.
Que se convierten en cenizas.
Horizontes lejanos.
Labios sin manos.
Despedidas de piel.
Memorias de ayer.

Pero si busco una constante.
Al rumor cambiante.
De los gobiernos de mi vida.
Solo hay un punto de partida.
Un camino marcado.
Mi hermano.
Ayer.
Hoy.
Y mañana.
Ni el tiempo ladrón.
Ni los jueces mortales.
Ni los demonios del Hades.
Podrán separar mi alianza.
Contigo.
Mi sangre, mi carne.

Mi amigo.

sábado, 17 de abril de 2010

Espacio de sueños.

Este escrito nace de un rayo verde.
De un libro de Julio Verne.
De un enlace maravilloso.
De unos ojos.
Que me llevaron de la mano.
Hacia horizontes mas cercanos.

A Laura.


El cielo es un prisma.
Refleja su estado.
En cada retazo.
En el semáforo en verde.
En los ojos de la gente.
En mi sueño por soñar.
En tu luz por brillar.
En el tiempo de arena.
Que ya no es condena.
De ningún labio.
Que cante a su lado.
Porque hay un espacio abierto.
Entre la tierra y el cielo.
Para llenarlo de canciones.
De poemas.
De jirones.
De vida y de esperanzas.
Que son las balanzas.
Que sostienen al mundo.
Que sostienen mi alma.

Darkness.

Apoya las manos.
En el espejo.
Su nariz toca el límite.
Del otro lado.
Su otra imagen.
Separadas por el infinito.
El tiempo se coloca a ambos lados del espejo.
A su lado, el tiempo es pesado.
Sus brazos están anclados.
A la oscuridad de la sombra.
Porque a veces el alma encoje.
Y su sombra ensancha.
La vida se cierra.
En torno a ella.
Los limites se bifurcan.
Y de lo poco que le queda, elige mal.
Y se enroca en miedo.
Que es como vivir sin consuelo.
Y su cara es un alma corrompida.
Viendo pasar los trenes de la vida.
El monstruo acecha.
Cercando la brecha.
Entre dos mundos.
Tan profundos.
Tan eternos.
Su átomo de luz.
Lucha contra eras de oscuridad.
Infancias, leyendas, antiguas alianzas.
Besos de fábula.
Para una princesa en horas bajas.
Y llora.
Sin lágrimas.
Mientras se agrieta el espejo.
Se distorsiona la nada.

Del otro lado.
Su imagen danza.
Los objetos vuelan.
Y cada negación se transforma en estrella.
De un horizonte poblado de sueños.
Bordados entre los brazos.
De una niña que cumple etapas.
Entre barcos de papel.
Naves cercanas.
Ilustres hermanas.
Viviendo acorde.
Con su consorte.
Que es su alma intacta.
De sueños.
De miradas al mundo.
Desde sus horizontes profundos.

El monstruo acecha.
Controlando el espacio.
Impidiendo el abrazo.
De Alicia.
Con su otro lado.

viernes, 16 de abril de 2010

Desayuno.

Dedicado a Nan, Carol, Cris y Yoli.
Que siguen retándome, compartiendo mañanas, desayunos y risas, conmigo.





Aroma a café.
Humeantes sueños.
Aliento de mañana.
Abiertas están las ventanas.
Afuera el sol.
Se entretiene.
Tocando a la gente.
Los pájaros vuelan.
Izando banderas.
Dianas de miradas.
Para el que todavía sueña.
Para el que elige.
De que color se viste.
Mis ojos debaten.
Entre entre el rojo y el blanco.
La cuchara gira.
Removiendo mi vida.
El pan crujiente.
Aceite.
Y tomate.
Son acicates.
Pequeños portales.
Al disfrute.
De mis venas.
Que se nutren.
Del espacio entre cielo y la tierra.
Cuando el tiempo se para.
Y desayuna mi alma.

Good Morning.

El sol comparte.
Sus rayos.
Que son ensayos.
De mañana.
De almohadas que giran.
Inicio de vida.
El cuerpo es un espejo.
De sol, de lluvia, de tiempo.
Se despierta contento.
Si alimentaron los sueños.
Su horizonte de cuento.
Sus deseos profundos.
Sus anhelos de vida.
Susurra la herida.
Apenas se oye.
Su aliento de cobre.
No rasga.
No mata.
Vencida por la mañana.
Porque la energía está en el centro.
Y te sientes fuerte.
Para afrontar el presente.

jueves, 15 de abril de 2010

Recuerdo ( Canción de Ismael Serrano)

Una canción de Ismael Serrano.
Poeta.
De música.
De letras.
El mundo rodando.
Y los actores girando.
El cielo.
El sol.
Las vidas.
Energías.
Que se mezclan.
En el tiempo.
Construyendo argumentos.
Motivos de arte.
Para evocarte.
Tu que vives en una canción.
Tan cerca.
Y tan lejos.
De mi corazón.
Un vagón.
La gente alineada.
En el escalón.
Un tren que llega.
Y alimenta.
Mis historias.
Que se liberan.
De mi.
Y tocan.
Las esquinas.
De mi locura.
Canto de labios afuera.
Haciendo bandera.
De ti.
Y cierro los ojos.
Y abro la boca.
Y el nombre que sale.
No se equivoca.
De vagón.
De horizonte.
De vida.
Tu cara.
Tus labios.
Tu Beso.
Tú.
Apareces.
Igual que ayer.
Ocupando los espacios.
De mi alma.
De mi cuerpo.
De mi sustento.
De minutos.
Que conforman las horas.
De los días.
Que suman.
Las noches de mi.
Sin ti.
Y tu memoria se enciende.
En el presente.
Abro la boca.
Mirando a los ojos.
De tus mares.
Intactos de olas.
Pronuncio tu nombre.
Y nadie responde.


Encendí un recuerdo de ti.
Sin descubrir el matiz.
De todas las mujeres.
Que se quedarón en ti.
Y yo te confundí.
En una mañana de música.
De rutina y diarios.
Queriendo partir.
Desde aquí.
A algún lugar relacionado.
Con la felicidad.
Del instante.
De tus labios.
De mi sangre.

http://www.youtube.com/watch?v=BOCKYL8CNxc&feature=related

Quebranto de moneda.

Dedicado a Cristina, que me retó a escribir algo sobre el quebranto de moneda( un tema bastante aburrido), al que le di la vuelta, tratándolo a mi manera.

Existe un descuadre de memorias.
Un debe enorme, en la memoria del olvido.
Un haber en los margenes mas queridos.
En los sueños de tu boca.
En la negación de derrota.
De las naves de tu alma.
Que salen a conquistar tus ganas.
De besar la primavera.
Aunque llueva.
En esta cueva.
Existe un quebranto de moneda.
Que es el exceso de tus maneras.
De comerte la vida.
De beberte los sueños.
Tu alma se expande.
Sin importarle.
Los limites.
De los diarios.
De la rutina en vena.
Negando condenas.


Vivir así, vale la pena.

Apariencias.

Silencio



Un palacio de silencio.
Entre dos.
Que no se miran.
No se tocan.
Los miro yo.
Mis ojos intentan captar.
La soledad.
Pero no hallo respuesta.
En esta estampa homogénea.

Un rumor disociado.
Se instala a mi lado.
Y la luz muestra.
Lo que mis ojos secuestran.

No necesitan hablar.
Para caminar juntos.
Entre horizontes profundos.
Sorteando las caras de sorpresa.
De los comunes mortales.
Que creen encontrar las verdades.
Cuando, como yo.
Miran sin ver.


No saben nada.

Certezas.

Se agolpan los sentimientos.
Los siento en el pecho.
Continente estrecho.
Para albergar siete mares.
Que son imanes.
De vida.
Que fluye a mi alrededor.
Conectando mis latidos.
Con los cinco sentidos.
Que me sobran.
Cuando siento de esta manera.
Porque existes.
Yo lo sé.
Igual que existe la luz.
Igual que las olas vuelven.
A bañar mi frente.
Borrando las mareas.
De mis condenas.
Por eso te busco, Alfa.
Desde mi Omega.

Mi cuaderno verde.

Un cuaderno verde.
Rodeado de gente.
Un lápiz de grafito.
Y la mirada de un niño.
Así me gusta escribir.
Desde hace poco hasta aquí.
Antes sólo utilizaba las teclas.
Música.
Y estas ventanas abiertas.
Ahora encontré la alegría.
De escribir en la calle.
En armonía con el sol.
En contacto con la gente.
Sintiendo los ojos de algún valiente.
Asomar.
A las páginas blancas de este cuaderno.
Que es luz para el enfermo.

Es sólo un instante.
Porque en el metro.
Me reservo los libros.
Sus historias bien adentro.

Tan sólo es un pequeño trayecto.
En autobús.
Al trabajo.
10 minutos.
En los que me abandono.
A mi lápiz, a mi cuaderno.
Al entorno.
De mis mares, de mi sangre, de mi todo.

miércoles, 14 de abril de 2010

Te niego, muerte.

Una hilera de columnas blancas.
Son las venas hermanas.
De recuerdos eternos.
Que aferran memorias.
Rescatando historias.
Enfrentando a la muerte.
En este presente.
De lluvia y pérdida.
De almas que viajan.
De cuerpos que cuajan.
Llantos por los ausentes.
Que hacen la cruz en sus frentes.
La muerte llega sin avisar.
Cabalgando a lomos del destino.
Sin marcas, sin augurios.
Llega y bebe de los labios.
De los cuerpos que señala.
Dejando para mañana.
El alma que inflama.
Razones para llamarla.
Porque la muerte no actúa de encargo.
Viste de largo.
Y sin invitación.

Los tambores de guerra.
Llaman a demonios de arena.
Lacayos del innombrable.
La muerte es mas bella.
Y no recoge miserias.
Por eso se lleva a mi gente.
Por mas que yo quiera cerrarle puertas.
Negarle soles.
Sembrar amores.
Llega y toma.
Y después me abandona.
Dama cruel y altiva.
Condenas a mi alma cautiva.
Del amor que te llevas.
De los rostros que me privas.
Yo te condeno a la criba.
De los soles que iluminan.
Para que todos te vean.
Para que te señalen.
Y de vergüenza te vayas.
De mis lugares.
Que quiero de luz.
Mis portales.
Llenos de mi gente.
Siempre presente.

Your hands.

Tus manos son mapas.
Rios de sangre.
Espejos de vidas.
Satélites.
De tu astro estrella.
Exploradoras del mundo.
Domadoras de heridas.
Caminantes de cuerpos.
Que son tu sustento.
Para sentir la llamada.
De la luz que persigues.
Llenando de esferas.
Tus primaveras.
Guiando tus pasos.
Postergando el ocaso.
Dandote abrazo.
Inyectando de calma.
Cada rincón de tu alma.

Wake Up.

Verde.



El viento no pide permiso.
Ocupando los espacios vacíos.
Vuela una bolsa de plástico.
Saluda un hombre simpático.
Un perro ladra.
A dos fantasmas.
Que sólo ve él.
O quizás yo también.
El sol se filtra por las esquinas.
De cada alambrada sin vida.
Y condena a la luz.
A la oscuridad encendida.
Que se alimenta de almas perdidas.
Sin almohada.
Sin dueño.
Sin rumbo de sueños.


Despierta la ciudad.
Destapando horizontes.
Nuevos labios.
Nuevos nombres.



martes, 13 de abril de 2010

Memories box.

Dedicado a Laura.


El niño que buscaba recuerdos.
Encontró una razón.
Para el corazón.
Una caja abierta.
De siglos entera.
De sueños maleta.
De aventuras repleta.
El niño que buscaba recuerdos.
Se perdió.
En un callejón.
Mirando las postales.
De un kiosco de prensa.
Una hoja se posó.
Sobre la torre Eiffel.
Y casi sin querer.
Giro la cabeza.
Y apareció su certeza.
De las manos de ella.
Las postales cayeron.
Las farolas enmudecieron.

Ella le ofreció una caja.
El le dio un corazón.
Sobraban las palabras.
Que se quedaron encerradas.
En una canción.


La canción de Wendy y Peter Pan.

Choose your dream.

El sol se esconde hoy.
Entre una cortina gris.
No tuvo su vis a vis, anoche.
Con la luna.
Demasiada dosis de locura.
Demasiada actividad de poetas.
De mensajes sin botella.
Mar adentro del cielo.
Sin horizontes de besos.
La melancolía de la ciudad.
Se reunió en algún lugar.
Y las estrellas no fueron suficientes.
Para calmar de sueños a la gente.
Por eso amaneció gris.
Con gotitas de lluvia.
Llanto de luna.

El sol oculta su figura.
Entre las nubes.
Y de la fuerza de sus rayos.
Brotarán nuevos tallos.
Que de luna dorados.
Germinarán nuevas flores.
Estrellas de colores.
Disipando los temores.
Tiñendo de sueños.
Horizontes nuevos.


Elige tu sueño.

lunes, 12 de abril de 2010

Open to your dreams.

Hay un rumor de bocas.
Hay un disfraz de viento.
Un jardín de tientos.
De envites de llamadas.
Hay una montaña despejada.
Para albergar tu mirada.
Hay un camino tallado.
En el suelo sembrado.
De tus pasos.
Hay alguien que suspira.
Por tu sonrisa.
Hay quien llama a la suerte.
De tu beso de frente.
De tus labios poemas.
De tu cuerpo de seda.
Hay quien te quiere.
Sin saber cómo eres.
Tan sólo te siente.
En su simiente.
El mundo está conectado.
Por sus soles hermanos.
Por los cuatro elementos.
Por cada costado.
De nuestro condado.
Del territorio de tu risa.
De la música del artista.
Del poema de las noches.
De tu cuerpo desnudo.
Del deseo como refugio.
Al latir tan profundo.
De la vida que se propaga.
Tocando cada almohada.

Fractura de mi.

De la primera razón.
Para doblar las rodillas.
Perder la energía.
Preso de la rutina.
Del corazón.
Víctima del dolor.
Sin mas razón.
Que la angustia en el pecho.
Del horizonte estrecho.
Pero piensa.
Nadie te aleja del camino.
Porque tú decides tu destino.
No está marcado.
Lo tienes a tu lado.
Colgando.
De tu costado.

Fractura.
Dique.
Oxidada herradura.
Cuando los ojos están cerrados.
A la abertura.
Lejos de ti.
Estas.
Cuanto mas lejos.
Intenta buscar dentro.
De tu epicentro.
Tu fuente de ti.
Tus ganas de vivir.

Busca razones.
Para encontrar otros corazones.
Música que conecte.
Con el lado florido de tu vientre.

Despierta.
Como si rompieras.
Por vez primera.
Divide el cielo en porciones.
Inventa canciones.
Busca tu espacio.
Condena al fracaso.
Lejos de tu lado.
Tu eres tu arquitecto
Sacúdete los complejos.
Aprende a vivir por entero.

domingo, 11 de abril de 2010

De cómo afeitarse.

Es conveniente que haya luz.
Y agua.
Son dos elementos indispensables.
Si quieres sentir.
El fluir.
De la hoja.
Primero de todo.
Abre los ojos.
Y saluda al espejo.
Que es tu reflejo.
Tu yo mas cercano.
Tu sueño hermano.
El jardín de tu risa.
El motín de tu llanto.
Reconócete en él.
Siguiendo la piel.
En cada trazo.
Abre el grifo.
Siente el agua.
Con las yemas de los dedos.
Ese latir tan pequeño.
De vida y libertad.
Prepara tu cara.
Con extracto de nube.
Y comienza.
A recortar apariencias.
A remover tu conciencia.
Liberando tu alma.
De todas las cargas.
Lastres de sueños.
Que murieron en el intento.
De vivir en tu cuento.
En el proceso.
Puedes herir tu reflejo.
Sólo es sangre.
No tengas miedo.
Son necesarias las heridas.
Para aprender en la vida.

Cuando termines.
Lava tu cara.
Enjuaga tu llanto.
Y mientras tanto.
Abre los ojos.
Poco a poco.
Allí estas tu.
Lleno de luz.

Words of love.

Las palabras que nacen del amor.
Son resortes de luz.
Mensajes de viento.
Verdadero alimento.
Para el alma.
Son savia para el sístole y el diástole.
Antídoto para la catástrofe.
De las cadenas.
De los problemas.
Las palabras que nacen del amor.
Son inmortales.
Para los lacayos del tiempo.
Que no tienen argumentos.
Para secarlas.
Las palabras que nacen del amor.
Sólo puede consumirlas el fuego.
De la pasión.
O el fantasma del olvido.
Que es antídoto contra la locura.
Del amor cuando termina.

Lover of moon.

Observa el sol a través del espejo.
Sintiéndose lejos.
Del cielo.
Araña los recuerdos.
Poseído.
Por imágenes del viento.
No cierra los ojos.
No es necesario.
Cuando el cielo es un calendario.
De puntos cardinales.
De su secreto.
En la calle le miran.
Sintiendo pena.
Le llaman loco.
Como si amar fuera poco.
Tormento.
En vida.
Y siempre la misma herida.
De querer lo que nunca ha tenido.
Y caminar confundido.
Al sentirse incomprendido.
Víctima del hastío.
De los días repetidos.
Esperando la noche.
Para sangrar haciendo derroche.
De alma.
Que se escapa.
Dejando un cuerpo vacío.

En la tierra sólo sangre y huesos.
Un poema escalera.
Y la luna entera.
Bailando desnuda.
Con el alma poeta.
Del hombre cometa.
Amante de luna.

sábado, 10 de abril de 2010

Peter Pan.

Alma nómada.
Eres.
Pueden atarte de manos.
Atropellarte a diario.
Pero vuelas.
Desde tu encierro.
Porque no hay cadenas.
Que te subyuguen.
Que te limiten.
Mar adentro.
Sin mas decretos.
Que tu libertad.
Aprendiste a esquivar.
Las balas que no matan.
Las palabras que encierran.
Las caras que no miran.
Las horas que no vuelan.
Aprendiste a sentir.
Para no sufrir.
Lejos de ti.

Te hiciste capitán de mundos paralelos.
Desembarcando una y otra vez.
Dando la espalda a la pared.
A cada nuevo viaje.
Soltabas equipaje.
Solo llevabas tus sueños.
Desde pequeño.
No te hacen falta piedritas.
Para volver.
A nacer.
Desde tu alma.
Cada mañana.


Peter Pan.

Fractura de Sangre.

Lo intento.
Te juro que lo hago.
Pero como agua de un lago.
Para mis manos.
Los argumentos resbalan.
Las lecciones me callan.
No aportan.
No enseñan.
Sólo cortan.
Mis alas.
¿Por que estamos tan lejos?.
Si compartimos el mismo lecho.
La misma sangre en el cuerpo.
No sé si es mi incapacidad de escuchar.
Si me cierra la herida de la edad.
Pero no te veo.
Mas allá.
De nuestros mundos distantes.
Remontando las horas.
Que fueron.
Veo mis ojos de niño.
Mi cuerpo de hombre.
Veo el tiempo que añade.
Y temo que sea demasiado tarde.
Para poder hablar.
Lo único cierto.
Es que duele en el pecho.
Este desierto.
Porque necesito.
Tu figura.
En mi cintura.
Necesito el gobierno de tu memoria.
Para completar mis palabras.
El mundo es un territorio vacío.
Si vencido por los intentos baldíos.
No puedo aprender de ti.

Padre.

Llevátelo.

Sangro.
Mientras apreto los puños.
Como queriendo cerrar.
La llave del sentir.
De tanto sufrir.
Y ando desorientado.
Entre luces que faltan.
En el cielo distante.
Sin poder entregarme.
Al olvido.
Que no olvida.
La herida.
Del mundo desierto.
Sin argumentos de ti.
En un intento de salvarme.
Desato la camisa.
Huérfana de sonrisa.
Buscando un último disparo.
Que termine de matar.
Al hombre que fui.


Llevátelo.

http://www.youtube.com/watch?v=0cPgpMSG9co

New born of Magic.

Una semilla.
Es el principio.
De vida.
O quizás no.
Mucho antes.
Cuando tu energía gigante.
Encontró otra razón.
Para el corazón.
Igual que se labra un camino.
Se encendió una ilusión.
Desde el mismo momento.
En que tus labios de cielo.
Besaron primero.
Ahí comenzó.
Una energía de dos.
Y tu vientre lo recuerda.
Mientras alberga.
Un nuevo corazón.
Ahora tienes dos.
Enlaces de cielo.
Lo dice el viento.
Que repite tu nombre.
Saludan las plantas.
Cuando al verte, resaltan.
Tu ombligo.
Porque es sabido.
Por todos.
Que de algún modo.
Traes nueva vida.
Aquí.
A este mundo de colores.
Que grita esperanza.
Sobrándole las ganas.
De sentir cómo late.
La nueva savia.
Que es magia.
De ti.

viernes, 9 de abril de 2010

Spring of you.

La primavera vino entera.
Para quedarse.
Sin mas bandera.
Que su melena.
De arboles confesos.
De rumores repletos.
Historias de viento.
Para los oídos contentos.
Juegos de luces.
Cantos que seducen.
Tu cuerpo despierto.
De alas repleto.
Gran monumento.
Se alinean las coordenadas.
En tu mirada.
Arriba el cielo.
Que es tu reflejo.
Abajo la tierra.
Que es tu bandera.
Tus manos abiertas.
De memorias repletas.
Y en el centro del mundo.
Tu corazón.

Escúchalo.

LOVE.

El amor es luz despejada.
Horizontes de miradas.
Es un estado de ánimo.
Es una parte del alma.
Que sufre cuando falta.
Que brilla cuando llega.
Que estalla cuando calla.
Dejándose llevar por sus alas.
Del labio del beso.
Esperanza del preso.
No se puede soñar si su fluir.
No se puede volar sin su batir.
No se puede sentir sin su sufrir.
De herida de tierra.
De vida sin mascara.
No hay cortinas.
Para su risa.
No hay dinero.
Que compre.
Su derroche.
Cuando llega multiplica las esferas.
Soltando tus cadenas.
Transpasando todas las fronteras.
De esta vida.
Y la otra.
Por mas remota.
Que sea.
Ni la muerte.
Encontró la suerte.
De tapar la boca.
A quien canta.

AMOR.

Chess.

Desde estos lugares.
Donde el viento es una excusa.
Para soñar deprisa.
Comienza la partida.
Todos los caminos.
Abren casillas.
Nuevos horizontes de vida.
Los peones son quereres.
Que te hieren de frente.
Cuando caen.
Dentro de ti.
Pero no debes sufrir.
Siempre hay un alfil.
Al que recurrir.
Para volver a vivir.
Un caballo al que montar.
Para volver a soñar.
Alinea tus fuerzas.
Liberando cadenas.
No hay mate.
Al latido constate.
De tu corazón.

On Friday.

Viernes.

De primaveras pendientes.
En los rincones de la tarde.
Una cometa volando perdida.
Planeando divertida.
Mientras abajo.
Los niños descalzos.
La miran.
E imaginan.
Mundos de allí.
Entre las horas de aquí.
Que se estiran entre sus manos.
Viviendo cuentos lejanos.
De dragones hermanos.
Mientras mis ojos de hombre.
Imaginan consortes de letras.
Que sean veletas.
Sin dirección.
Historias vividas.
Desde las retinas.
De los ojos de un niño.
De mi.

Green door.

Todas las tardes en el camino de vuelta al trabajo, me llama mucho la atención una ventana verde, que parpadea, en la inmensidad de cristales que conforman un edificio inmenso en Plaza de Castilla...

Dedicado a Carol:
(Que siempre me dice: "Eusebio, tienes que escribir algo sobre la ventana verde", cuando nos volvemos juntos en su coche, de regreso a casa)

Su fulgor resalta.
Entre el paisaje gris.
Sin otro matiz.
Que las luces opacas.
De los cristales de plata.
De la ciudad.
Una ventana verde, resalta.
Realidad alterada.
De un tiempo presente.
Cuando anochece de repente.
Y te encuentres ausente.
Dirige tus pasos.
Allí.
Dejando que el brillo penetre.
Tus labios quemados.
De tanto sentir.
Cierra los ojos.
Abre las puertas.
A lo que la noche encierra.
Y comienza a vivir.
El sueño de ti.

jueves, 8 de abril de 2010

Despertares.

Camina despacio.
Cerrando las puertas del cuento.
Abriendo cajones.
Azúcar y café.
Un sorbo de agua.
Para calmar la sed.
Galletas de chocolate.
Y un toque de música.
Surge una canción.
Desde el corazón.
El sol se asoma.
Sembrando de mañanas.
Cada porción de su espalda.
De estrellas salpicadas.
Imanes de luna.
Vestigios de cuna.
Del cielo a la almohada.
De la almohada a su cuerpo.
Que reluce contento.
De sueños repleto.

miércoles, 7 de abril de 2010

Déjavu.

El tiempo es un bucle.
Un circulo que gira.
Una cara que mira.
Tú.
Te asomas a mi memoria.
A mi guiño de historia.
De ti y de mi.
Cómo eras.
Cómo fuimos.
Cuando nos perdimos.
Del mundo de aquí.
No estas.
No estoy.
Me fui.
De ti.
Se estrecha el círculo.
Por los bordes te pierdo.
Apenas atento.
A tu vida sin mi.
Pero a veces patino.
Víctima de un déjavu repentino.
De tus labios en mí.
Y del olvido me pierdo.
Intentando entenderlo.
Si el lago esta en calma.
Si tus recuerdos ya no desarman.
¿Que haces aquí?
Acaso te hiciste infinitesimal.
Cuando llegó el final.
Del después del olvido.
Y tu eco repetido.
No se cansa de venir.
A seguir raspando este sentir.
De horizontes sin ti.
Estando la hoguera en calma.
Jugando con los rescoldos de mi.

Memories of life.

Mano sobre mano.
Piel contra piel.
Tacto humano.
Somos hermanos.
De sangre y de hueso.
Participes de partidas.
De principios y finales.
De memorias de vidas.
Acaso no soy.
Acaso no fui.
Lo que sentí.
Lo que viví.
Lo que perdí.
Y vuelta al principio.
Esquivando precipicios.
Sin mas horizonte.
Que mas manos de hombre.
Sin mas argumentos.
Que los apuntes del viento.
Que repiten mi nombre.
Activando resortes.
Aromas, sabores.
Nuevos colores.


"I am alive"

Memorias de la llorona ( Parte primera)

La vida enfoca una calle.
Una larga avenida.
El cielo proyecta una sombra.
Que es una herida.

Llorona.

Tu llanto enmudece la tierra.
Tu pena detiene las esferas.
Suspendidas en el cielo.
Que siente primero.
Tu infinita condena.
Tu voz transpasa paredes.
Tocando a la gente.
Que reza de frente.
Que vuelva la luz.

Llorona.

martes, 6 de abril de 2010

Oltremare.

El cielo es una sucesión de portales.
De sueños de principios y finales.
De farolas en las calles que iluminan.
Las historias por contar.
Es un caballero andante.
Con alegre semblante.
De gigantes de estrellas.
Su armadura.
Entera.
Listo para cabalgar.
Hay tantas razones para reír.
Como nebulosas lejanas para llorar.
Pero son tan pocas las constelaciones.
Que resaltan entre canciones.
Son tan poco los espejos.
Que devuelven reflejos.
Que las flores se encierran.
En prisiones de pétalos.
Negando la luz.
Sufriendo la cruz.
De quien se siente herido.
Por sentir los latidos.
De la tierra sin amo.
De horizontes lejanos.

Suena el piano.
Las notas navegan.
Vuelve la luz.
Abre fronteras...




Why?

El diablo esta aquí.
Dice el viejo.
Mientras rompiendo los espejos.
Maldice.
Insulta y patalea.
A sus 80 no puede dar crédito.
A lo que dicen los periódicos.
Esos infames mensajeros.
De desastres entre lineas.
De una vida curvilínea.

"Que será de mi niña.
Mi nieta de 5 años.
Cuando leo que en un barrio.
Dos niñas quedan para pegarse.
Mientras la muerte llega para quedarse.
Encerrada en la violencia.
Mas extrema.
De la sangre porque sí."

No quiero morir a mis 80.
Si en los días que me quedan.
Veo este mundo sin brillo.
Gobernado por los iracundos.
¿Dónde quedaron los hombres?
¿Hacia donde van nuestros nombres?
Si se hunde la belleza.
Enterrada en la violencia.
De la bestia que hay aquí.

No es una muerte.
No es un impacto en los noticiarios.
Es una derrota mas que sumar.
En la cuenta de desastres de la humanidad.

Open.

Es curiosa la vida.
Es curiosa la ciencia.
De las venas.
Del alma.
De las cosas que no tienen ecuación.
Ni limite.
Ni reacción.
Tan solo emoción.
No existe explicación.
Tan sólo el derroche.
Del corazón.
Un aroma.
Un verso.
Una canción.
Un labio de madrugada.
Un mapa de tu cuerpo.
Una emoción sin argumento.
Tan sólo un disparo.
En el centro.
Del sentimiento.

Abro mi pecho.
Plego las alas.
Arrojo la armadura.
Por la ventana.
Dispara.
Da igual tu rostro.
No te pido el nombre.
Solo quiero tu sangre.
Caliente.
Manifiestate.
Toma del mundo las formas.
Mientras recojo mis sombras.
Deja que te abra la puerta.
A mi memoria.

The hope of Frodo.


Oscuridad.
Miedo.
Duda.
Silban las flechas.
Resuenan las muecas.
El aire esta viciado.
Cuando te encuentras al lado.
De una nube de orcos.
El anillo pesa en mi mano.
Quema.
Duele.
Envenena.
Una plaga de pena.
Me ata a la tierra.
Un grito descompone el espacio.
Anunciando el despertar de una nueva criatura.
Gandalf avanza.
Iluminando la estancia.
Rompiendo barreras.
Es luz.
Esperanza.
Contrapeso de la balanza.
Siempre me sentí una débil criatura.
Entre tanta hermosura.
De Elfos y hombres.
De corazón noble.
Un puente marca nuestro destino.
El bien y el mal cruzan el mismo camino.

Silencio.
Fuego.
Locura.

El Balrog alcanza.
Nuestra esperanza.
De cruzar a la salida.


Gandalf el gris.
De la luz adalid.
Se gira.
Enfrenta.
Desde sus manos de anciano.
Recitando arcanos.
El tiempo se posa.
En su alma esponjosa.
De magia henchida.
Aliento de vida.
Para mi herida.



"No puedes Pasar"

Ray of me.

Cielo azul.
Cielo Extenso.
Danza en llamas.
Desde mis ganas.
De correr, de gritar, de sentir.
Cielo libre.
Libres vuelan las palabras.
Que acompañan.
Los caminos de la gente.
Los labios recientes.
Desayuno de amantes.
De rendija de persiana.
Abierta en la ventana.
De los cuerpos desnudos.
Historias ventiladas.
Que ondean al aire.
Escaparon del sueño.
De matices pequeños.
De horizontes gigantes.
En las esquinas quedan las dudas.


El sol no las alumbra.


Hoy, no.

No hay camino.
Mis pies son los que marcan mi destino.

lunes, 5 de abril de 2010

Trees.

Sentado con las piernas cruzadas.
Observa el paisaje.
Captando el mensaje.
De los arboles que hablan.
Que cruzan palabras de tiempo.
De cortezas desiertos.
De memorias de espaldas.
De grandes hazañas.
De amores tatuados.
Inmortales al olvido.
Inmutables al sentido.
No hay explicaciones.
Para las hojas que vuelan.
Que huyen de las trincheras.
Del desierto de los hambrientos.
De tiempo sin pausa.
El viento lo sabe.
Porque habla el mismo lenguaje.
Que los arboles, que los pájaros.
Que las olas.
Que los niños que juegan a deshoras.
El tiempo se detiene en tu mano.
Juega con él.
Tatúa la sed.
De tu vida inmensa.
Sin hacer ofensa.
Exprime tu gesto.
Inventa pretextos.
Besa en los labios.
Olvida rosarios.
Tu eres la Fe.
Mantente en pie.
Y conquista tu espacio.
Amontona tu energía.
Libera tu alegría.
Vive la vida.

Light.

Dos pasos separan.
Tu cara.
De mi.
Allí estas.
Eterna, inmutable, dura.
Dos pasos me separan de ti.
La mas terrible criatura.
Tus cadenas laceran mi cintura.
La oscuridad es tu aliada.
Llenando de alambrada.
Mi mirada.
El miedo propaga tu peso.
Castillo de huesos fijos.
Que condena a mis hijos.
Yo te desafío.
Desde el frío.
Desde el dolor de amarte.
Sin mirarte.
Del suplicio de abrazar tus huecos.
Tus horizontes de espejos.

Yo te desafío, Soledad.
Al rincón de mi reverso.
Porque ahora me sobran los versos.
Me sobran los días, me sobran los besos.
No estoy dispuesto a sangrar por ti.
Ni una gota mas.
Me falta mundo que gozar.
Me sobra tiempo, soles y vientos.
Tengo los bolsillos repletos.
Los arboles escupen casualidades.
Los poemas dicen verdades.
Y yo disfruto cantando, escribiendo, gozando.
Mientras niego tu desencanto.
De vivir entre llanto.

Música.

La música es agua.
Es tiempo infinito.
Es palabra.
La música no encierra.
La música abarca.


Mi alma.

Samsara.

Rueda el tiempo.
Se agolpan las palabras.
Contenidas de vida.
Destapo la herida.
Y el viento golpea las ventanas.
Vuelvo.
Aquí.
Al inicio.
La rueda gira, archiva y avanza.
Resaltan mis ganas.
De comerme la corteza.
De abrir mi cabeza.
A las ventanas.
El rumor de los versos.
Las canciones de palabras.
Brillan oxigenadas.
Después de el último viaje.
Al horizonte de mi mirada.
Abarco mas mundo ahora.
Mas tierra, mas viento, mas sombra.
Soy mas joven.
Mas viejo.
Mas nada.
El corazón sigue latiendo.
Destruyendo monumentos.
Carnavales de hastío.
Instrumentos repetidos.
Y aquí estoy de nuevo.
Algo cambió en mi mirada.
Será el espíritu de la noche.
Será el dolor de la mañana.
Será el miedo intenso.
Que ya no me atenaza.
Lo enfrenté.
Desde aquí.
Desde la atalaya de mi alma.
Rodeado de luz.
De retazos de vida pasadas.
Esta rueda de Samsara.
Me enseño una palabra.

Simple.

La vida es simple.
Un arroyo de tiempo.
Un encuentro de almas.
De puntos de luz.
Que cargan su cruz.
Mientras olvidan su nombre.
En las distancias.

Yo.
En mi camino.
Encontré mas luces.
Que me nombraron.
Que me llamaron.
Que me abrazaron.
Recordé mi nombre.
Desde aquí.
Desde el punto de partida.
De mi vida.
Ahora.
Mas joven.
Mas viejo.
Mas nada.