domingo, 15 de noviembre de 2009

Music

Aquí estoy, sentado frente al ordenador, agarrando con la mano derecha el ratón, busco en mis documentos/música y elijo una canción.
Silencio, como en cualquier comienzo sólo hay silencio, después los acordes avanzan, las letras resbalan y yo tatareo...un cosquilleo se propaga por los puntos vitales de mi cuerpo y me sumerjo, preso de los instrumentos musicales. El significado de la canción penetra bien dentro y me siento parte de la historia, que resuena fuerte, dentro y fuera, invadiendo territorios del entorno, taladrando a golpe de estribillo mi corazón.
Y me siento protagonista de esta historia cantada, y me imagino y me pierdo detrás de las guitarras.
Me enamoro de tu voz, de tu presencia, tan cerca y tan lejos...porque yo te tengo aquí conmigo, ocupándolo todo y tú ¿dónde estarás? ¿ que pensabas mientras compusiste esta canción?. Hoy quiero decirte que tus versos me atan cerca, abriéndome los ojos, y vuelo impulsado por los acordes, mientras tu voz susurra secretos en mi oído.
Porque la música conecta con la esencia de mi cuerpo, ese lugar en donde habita el alma, el cuartel general de la maquina de los sueños que trabaja sin descanso, sin horarios, día y noche, vomitando guiones de esta historia eterna que es mi vida.
Y yo me siento vivo cada vez que descubro un nuevo acorde, una nueva canción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario