sábado, 2 de enero de 2010

100

Tomo asiento.
Recorrí un largo camino hasta llegar aquí, ha sido duro encontrarle.
Pido una copa y brindo en su honor, mirándole a los ojos.
Sus ojos no tienen fondo, aventurarse a su contorno, es mirar directamente el universo.
Encantado de conocerle, señor destino.
Me preguntarás por qué vengo magullado, por qué la vida se marca en mis mejillas.
Si, sé que es esa tu primera pregunta.
Déjame que te cuente:

"Vengo de pelearme con el tiempo, de partirme la cara en cada segundo, de intentar frenar su influencia en mí.
En un primer combate, me enfrenté cara a cara con el pasado.
Y descubrí en el cristal del tiempo mi cara de niño.
Mi yo del otro lado me grita, me insulta, llora de impotencia al verme.
Lo siento pequeño.
Sé que querías ser astronauta, director de cine o poeta, y no se han cumplido ninguna de las tres.
Lo intenté de veras, pero no lo logré.
Para tu consuelo te diré, que ahora, en el presente de indicativo desde el que te escribo, hablo todos los días con las estrellas, y derramo palabras, que modelo, hasta convertirlas en pequeños relatos.
Es mi manera de reconciliarme con mi cara de niño, con tus ganas de soñar, con mi necesidad de ti.
Perdóname... sé que lo harás.

En el segundo combate, tuve que vermelas con mi corazón presente.
Lo sé estas herido.
El sístole y el diástole suenan hueco hoy.
Las heridas estas abiertas y yo no he sabido mantenerte sano, a golpe de despedida, de mirada perdida, de poema a medio terminar.. te fui hiriendo cada vez mas.
Se que te enfadas porque cambio de nombres, y tu ya no puedes seguir olvidando, sin sufrir cada día un poco mas.
Pero piensa que hemos pasado momentos eternos, y quién sabe si a la vuelta de la esquina, llegue hasta esta orilla, un corazón a tu medida, con el que bailar un tango sin final.
Perdóname, corazón y si no es mucho pedir late mas fuerte, recuerdame que sigo vivo."

Y ahora me queda el futuro.
Por eso he estado buscándole por los confines de mi vida.
Señor destino yo quiero ser eterno.
Si no es mucho pedir, le pido ser mi aliado en la lucha contra el tiempo.
Le aviso que no voy a permitirle a usted, jugar mis cartas por mi.
Solo le pido que me acompañe en este viaje y me muestre la mejor cara.
Yo a cambio te daré mi vida en cada verso, fabricando cada noche una historia para ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario