domingo, 27 de diciembre de 2009

First Love.

Son las 11:00 de la mañana de un sábado cualquiera, en la cama tapado hasta los ojos, mastica sus últimos sueños.
"De pie en las escaleras mecánicas de un centro comercial, levanta la mirada y observa la escalera, que en paralelo recorre distinta dirección.
Allí esta ella, quiere decirle algo, pero antes de que las palabras escapen de su boca, desaparece en el horizonte del último escalón."
Sale del sueño por la puerta de emergencia y abre los ojos a una nueva mañana.
Corrije las cortinas y abre las ventanas de par en par.
El sol entra a borbotones, creando sombras y sugiriendo maneras de disfrutar.
Mientras se cepilla los dientes, piensa en ella, en la chica de sus sueños.
Aquella que recorre, saltando cada noche, la distancia que separa el suelo de la luna, y le invita a seguirla hasta el final...hasta que reviente el sol de un nuevo día.
Pero esta mañana algo suena diferente.
Su imagen del espejo le devuelve una nueva mirada, una mirada desafiante y llena de energía.
Porque hoy va a salir al mundo a buscarla, a derrapar por senderos sin descanso, a cobrarse el premio de sus labios.
Estrenando pinturas de guerra, planta la primera pisada de un camino abierto, con la mochila repleta de ilusiones, con las murallas del alma abiertas de par en par.
Sus quince años le confieren insolencia e insensatez.
A media mañana sus pies desembocan en un parque repleto de vida , donde unos niños juguetean entre dos arboles que son porterías, mientras sus madres hablan distraidas.
En un banco sentada esta ella.
Siente el impacto en el pecho y cae de bruces.
¿Es el cielo o el azul de sus ojos?
Allí, sentada en el banco, le espera su primer amor.

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