sábado, 10 de abril de 2010

Fractura de Sangre.

Lo intento.
Te juro que lo hago.
Pero como agua de un lago.
Para mis manos.
Los argumentos resbalan.
Las lecciones me callan.
No aportan.
No enseñan.
Sólo cortan.
Mis alas.
¿Por que estamos tan lejos?.
Si compartimos el mismo lecho.
La misma sangre en el cuerpo.
No sé si es mi incapacidad de escuchar.
Si me cierra la herida de la edad.
Pero no te veo.
Mas allá.
De nuestros mundos distantes.
Remontando las horas.
Que fueron.
Veo mis ojos de niño.
Mi cuerpo de hombre.
Veo el tiempo que añade.
Y temo que sea demasiado tarde.
Para poder hablar.
Lo único cierto.
Es que duele en el pecho.
Este desierto.
Porque necesito.
Tu figura.
En mi cintura.
Necesito el gobierno de tu memoria.
Para completar mis palabras.
El mundo es un territorio vacío.
Si vencido por los intentos baldíos.
No puedo aprender de ti.

Padre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario