El vacío es una cicatriz en la frente.
Una herida abierta contigo mismo.
Un remolino de duda.
Un cúmulo de golpes.
De sueños desprendidos.
De amaneceres incumplidos.
De veneno en los latidos.
De pasillos sin pisar.
Es el horizonte cerrado.
El labio seco de olvido.
El tren que nunca llega a destino.
El tercer acto sin final.
Pero si me ofreces tu mano.
Yo me lanzo sin duda.
Al abismo que todo lo cura.
Desde tus ojos.
De ti.
El vacío es la ausencia, es el silencio.
ResponderEliminarA veces es el ruido.
Es la muerte, es la duda.
Es un todo contigo, pero sin ti.
Es un calendario vacío de tus sonrisas.
Es una casa hueca de tu poesía.
Es un cofre de riquezas sin tu tesoro.
Tu tesoro que son tus manos, y tus caricias.
El vacío es mi silencio solo, sin tu silencio
Para que le haga compañía.
Es mi hombro solo, andando solo por la vida.
Es un dolor sin herida.
Una muerte sin anuncios.
Sin tiempos para la despedida.
El vacío es insoportable.
Pero si estas tú,
en la distancia y en el espejo en el que te ves, me miras.
Mi mano atravesara los portales.
Nuestras manos encontrar mas poesía.
Encontraran la forman de llenar los abismos con colchones de risas.
Para que cuando saltemos.
Nos reciba la vida, en flores y mariposas de colores.
Y hadas que tejen el destino con caricias.