jueves, 11 de febrero de 2010

Without you.

A veces soy un gigante.
Una montaña de mi.
Con los ojos encendidos.
El alma desatada.
El mundo es un poema.
Sin aliteraciones.
Sin metáforas de tristeza.
Ningún significado se escapa.
Todo lo abarco.
Todo lo puedo.
Los imposibles son epítetos.
Que definen mis actos.
Sin cadenas.
Sin lastres que me detengan.
El cielo me pide perdón.
Por la insistencia.
De su presencia.
Y es en ese instante de apoteosis.
Cuando te miro.
En el reflejo de una estrella.
Y me rompo.
Los pedacitos de mi ruedan por la tierra.
Intentando recomponerse de ti.
De tu recuerdo presente.
Sin ti.
Y como ahora no estás.
Pero la vida sigue.
Yo me voy a dormir.
Abrazado a la nada.
Agarrándome el alma.
Que se derrama sin ganas.
De otra noche.
Sin ti.

5 comentarios:

  1. A veces eres un gigante,
    A veces un reflejo de la espuma.
    A veces no se, desde que ojos te miro.
    Si desde aquellos
    Que me prestan las estrellas para encontrarte,
    O desde los de la luciérnaga
    Que jugando en tus cabellos te acaricia.

    Tengo un hilo de plata muy finito,
    Una aguja
    Prestada por una espina de un árbol cristalino,
    Para cocer este fragmento de mi alma,
    A los ropajes de tu espíritu.

    Y cuando las ausencias te evoquen con sus fauces grises
    Ilumínalos con el rostro
    De hombre niño
    Que portas desde el día que naciste,
    No hay magia más poderosa,
    Que ponerle la cara y el pecho a la vida.

    Y cuando las ausencias te reclamen con fantasmas
    Yo estoy de este lado del mundo regalándote poesías.

    Aunque no sea mi presencia la que reclames
    Y en el fondo oscuro de tus brazos, no sea mí
    Cintura lo que mas precisas.

    De este lado de tu mundo
    Del otro lado de la ventana.
    Quisiera recomponerte el alma con caricias.

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  2. Hola Eusebio!! Excelente poema. Me encanta lo que escribes, tu sensibilidad, tu estilo. Soy seguidor incondicional de tu blog.

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  3. Sabina, Hadita lunares, tu me recompones de palabra y de sonrisa.
    De noche y de mañana de alegría.
    Tus poemas son piedras luminosas en mitad de este charco blanco.
    Un besote enorme.

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  4. Daniel, leer este comentario de ti es un premio desorbitado, porque te admiro.
    Un abrazo grande, poeta.

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